Me gusta mucho hacer galletas caseras, y si son tan fáciles y ricas como estas que os traigo hoy, elaboradas con leche condensada y Maizena, pues me gusta aún más.

Estas galletas de leche condensada y Maizena tienen un sabor muy rico y especial. Aunque no lo parezca, no son unas galletas muy dulces, por lo que acompañadas de una rica mermelada ganarán más en sabor.

Esta receta de galletas, al estar elaborada con Maizena (harina refinada de maíz), no contiene gluten, por lo que estas galletas son aptas para todos aquellos que seáis celíacos.

Galletas de leche condensada y Maizena
Galletas de leche condensada y Maizena

INGREDIENTES

– 1 huevo
– 200 g de leche condensada
– 350 g de Maizena
– 100 g de mantequilla

Ingredientes para las galletas de leche condensada y Maizena
Ingredientes para las galletas de leche condensada y Maizena

ELABORACIÓN

Ponemos el huevo en un bol y lo batimos un poco. Seguidamente agregamos la mantequilla derretida (unos segundos en el microondas) y añadimos la leche condensada.

Agregando la leche condensada
Agregando la leche condensada

Mezclamos bien hasta que los tres ingredientes estén bien unificados.

Ahora es el momento de tamizar la Maizena sobre la mezcla anterior. Esto lo hacemos para que nos quede una masa más fina y sin grumos.

Tamizando la Maizena
Tamizando la Maizena

Vamos mezclando (con una espátula y posteriormente con las manos) hasta que la Maizena se haya integrando bien en la mezcla de huevo, mantequilla y leche condensada. Nos tiene que quedar una masa lisa y compacta que podamos trabajar con las manos.

En este punto ya tenemos la masa de nuestras galletas lista.

Amasando la masa de galletas
Amasando la masa de galletas

Vamos formando bolitas con la masa y las colocamos sobre una bandeja de horno, con papel sulfurizado (de hornear) para que las galletas no se peguen al hornearlas.

Ahora es el momento de decorarlas como más nos guste. En mi caso las he preparado de tres formas diferentes: unas las he aplastado con un tenedor, para dejar los surcos de las púas bien marcados (ver siguiente foto), otras las he dejado tal cual en forma de bola, y a otras las he hecho un agujero en el centro (simplemente presionando con el dedo) para poder rellenarlas posteriormente con leche condensada, fruta o mermelada.

Dando forma a las galletas
Dando forma a las galletas

Una vez hayamos decorado las galletas las llevamos al horno, que lo tendremos precalentado a 160 ºC, y las dejaremos que se horneen durante 12-15 minutos.

Nos quedarán unas galletas muy blancas (no se doran en la superficie), por lo que, para comprobar que están bien hechas, os recomiendo que a los 12 minutos abráis el horno y miréis si la parte inferior de la galleta está dorado. Este será el momento de sacarlas del horno, o bien de dejarlas un par de minutos más.

Galletas recién horneadas
Galletas recién horneadas

En este punto ya tenemos las galletas bien horneadas.

Por último pasaremos nuestras galletas a una rejilla, para que se enfríen completamente y no cojan humedad.

VÍDEO