
Si te gustan los Ferrero Rocher, esta receta te va a encantar. Hoy te enseñaré a preparar unos bombones tipo Ferrero Rocher caseros, hechos con solo 4 ingredientes y sin complicaciones. El resultado son unos bomboncitos crujientes por fuera, cremosos por dentro y con una avellana entera en el centro, muy parecidos a los originales… ¡pero hechos en casa y con ingredientes sencillos!
Son perfectos para regalar, para preparar en Navidad o para darte un capricho de chocolate en cualquier momento. Además, no necesitan horno y se preparan en muy poco tiempo.
Ingredientes
- 100 g de galletas de barquillo
- 150 g de Nutella (o cualquier crema de cacao con avellanas)
- 125 g de chocolate negro (o con leche, al gusto)
- Avellanas: 30 g de avellanas picadas + 12 avellanas enteras (una por bombón)
Elaboración
Comenzamos desmenuzando los barquillos. Colócalos en un bol y machácalos con un mortero, rodillo o incluso con las manos. No queremos un polvo fino, sino trocitos que aporten textura crujiente a los bombones.

Añade al bol la Nutella e intégrala bien hasta obtener una mezcla densa y homogénea. Con estas cantidades salen unas 12 bolitas, aunque la receta admite variaciones y puedes ajustar la textura añadiendo más barquillo o más crema de cacao si lo ves necesario. Cuando tengas la mezcla lista, tápala y llévala al frigorífico durante unos 30 minutos, para que se enfríe y sea más fácil de manipular.

Mientras tanto, pica las avellanas tostadas dejando trocitos visibles. No las tritures demasiado; esos pedacitos son clave para conseguir el toque crujiente típico de este bombón. Reserva.
Pasado el tiempo de reposo, forma bolitas con la mezcla de barquillo y Nutella. Aplasta ligeramente cada porción, coloca una avellana entera en el centro y vuelve a cerrar hasta formar una bola compacta y redonda. Ponlas en una bandeja forrada con papel de horno y guárdalas de nuevo en la nevera para que se enfríen antes del baño de chocolate.

Para la cobertura, derrite el chocolate negro al baño María o en intervalos cortos en el microondas. Una vez fundido, añade las avellanas picadas e intégralas por completo. Saca las bolitas del frigorífico y sumérgelas una a una en el chocolate, rebozándolas bien. Escúrrelas con un tenedor, dando golpecitos para retirar el exceso y conseguir una capa fina.

Déjalas reposar sobre papel de horno hasta que el chocolate se solidifique. Puedes esperar a temperatura ambiente o acelerarlo metiéndolas un rato en la nevera. Una vez solidificado, retira el exceso de chocolate de la base con cuidado y sin manipular mucho, para que el chocolate no se caliente. Y ya estarán listas para servir o guardar en un tupper durante varios días.

Al cortarlas verás una fina capa crujiente de chocolate con avellanas, una avellana entera en el centro y un interior cremoso y delicado. No son exactamente como los Ferrero Rocher originales, pero quedan sorprendentemente parecidos y están deliciosos. Una receta fácil, resultona y perfecta para sorprender.
A continuación te dejo el vídeo con el paso a paso de esta receta.
