Hace una semana me dí cuenta que tenía un bote de mermelada de naranja, o naranja amarga, en la despensa, y que estaba a punto de caducar. Pensando en qué receta lo podía emplear, se me ocurrió preparar estas caracolas de hojaldre con naranja y chocolate, ya que es una receta fácil y rápida, y la combinación de la naranja con el chocolate me encanta.

La verdad es que la mermelada de naranja amarga no es de mis favoritas, precisamente por su sabor tan amargo, pero reconozco que en esta receta con hojaldre queda de maravilla, ya que se mezclan los sabores de la mermelada de naranja con el hojaldre y quedan unos bollos con un sabor muy rico y sutil.

Caracolas de hojaldre con naranja y chocolate
Caracolas de hojaldre con naranja y chocolate

INGREDIENTES
(para 6 caracolas)

  • 1 lámina de hojaldre rectangular (275 g)
  • 2 cucharadas soperas de mermelada de naranja amarga
  • 50g de chocolate
Ingredientes para las caracolas de hojaldre
Ingredientes para las caracolas de hojaldre

ELABORACIÓN

Extendemos la lámina de hojaldre y la cortamos justo por la mitad.

En una de las mitades untamos la mermelada de naranja.

Poniendo la mermelada de naranja sobre el hojaldre
Poniendo la mermelada de naranja sobre el hojaldre

Cuando hayamos terminado de extenderla, la tapamos con la otra mitad del hojaldre (ayudándonos del papel en el que viene envuelto el propio hojaldre).

Hacemos unos cortes longitudinales de 1 centímetro o 1,5 centímetros. Con estas tiras de hojaldre rellenas haremos, a continuación, nuestras caracolas.

Cogemos una de las tiras, sujetamos un extremo con la mano derecha y el otro extremo con la mano izquierda, y comenzamos a girar cada mano en sentido contrario, retorciendo el hojaldre, de forma que la tira se convierte en una espiral, como vemos en la siguiente foto:

Retorciendo el hojaldre
Retorciendo el hojaldre

Una vez que tengamos las tiras de hojaldre «retorcidas», en forma de espiral, comenzamos a formar la caracola, enrollando las tiras sobre sí mismas de forma circular. En la foto podéis verlo más gráficamente:

Enroscando la caracola
Enroscando la caracola

Para terminar de dar forma a nuestra caracola, metemos el extremo del hojaldre debajo de la misma. De este modo, al hornearse el hojaldre, no se deformarán nuestras caracolas.

Hacemos el mismo paso con el resto de tiras de hojaldre, hasta acabar las seis caracolas.

Ahora ponemos las caracolas sobre una bandeja de horno y las pincelamos con yema de huevo. Esto lo hacemos para que, al hornearse, nuestras caracolas queden con un bonito color dorado.

Caracolas pinceladas con yema de huevo
Caracolas pinceladas con yema de huevo

Una vez pinceladas llevamos las caracolas al horno, que lo habremos precalentado a 180 ºC, y dejamos que se horneen durante 15-20 minutos o hasta que veamos que están bien doradas.

Cuando las caracolas estén bien horneadas, las ponemos sobre una rejilla y las dejamos enfriar.

Mientras se enfrían las caracolas derretimos el chocolate en el microondas, en intervalos cortos para que no se queme.

Cuando esté derretido todo el chocolate, lo ponemos en una manga pastelera (también nos sirve una simple bolsa de congelar, por ejemplo) para echarlo finamente sobre las caracolas.

Ahora que las caracolas están frías y el chocolate derretido, cortamos el pico de la bolsa (o manga pastelera) y vamos poniendo hilos de chocolate sobre las caracolas, de forma que nos quede algo similar a lo que vemos en la foto:

Hilos de chocolate sobre las caracolas
Hilos de chocolate sobre las caracolas

Una vez que el chocolate haya solidificado ya tendremos nuestras caracolas listas para comer. Si en vuestras cocinas hace mucho calor y el chocolate no solidifica sobre la caracola, os recomiendo que las metáis 5 minutos a la nevera, quedan perfectas.

Espero que os haya gustado esta receta de caracolas de hojaldre con naranja y chocolate.

VÍDEO