Dentro de unos días se celebra el Día de San Valentín o Día de los Enamorados. Este año lo vamos a celebrar elaborando unas ricas galletas caseras de mantequilla con forma de corazón y cubiertas de un delicioso baño de chocolate.
Estas galletas de corazón para San Valentín quedan muy vistosas y están realmente ricas, con un delicado sabor a mantequilla y el toque justo de dulzor. Además mejoran su sabor gracias al baño de chocolate que las daremos una vez horneadas.
Sin duda estas galletas serán un regalo muy especial para vuestros seres queridos, ya sea pareja, familiar o amigo.
Ingredientes de la receta
- Mantequilla (150 g)
- Azúcar (100 g)
- Harina (250 g)
- Huevo (1 mediano)
Para la cobertura:
- Chocolate (100 g)
- Mantequilla (5 g)
(*) Si lo necesitas, puedes consultar las tablas de medidas y equivalencias en cocina y repostería.
Elaboración de la receta
En un bol batimos la mantequilla, que la habremos sacado de la nevera con antelación, para que en el momento de comenzar a elaborar la receta esté a temperatura ambiente. Seguidamente añadimos el azúcar y lo integramos hasta conseguir una crema suave. En este punto añadimos e integramos el huevo, que también lo tendremos a temperatura ambiente. Por último incorporamos la harina. Mezclamos el conjunto de todos los ingredientes hasta obtener una masa unificada. Al final terminaremos moldeando la masa con las manos. Como podéis ver en la siguiente foto, no resulta una masa pegajosa.
Ahora colocamos la masa de galleta en la superficie de trabajo, entre dos láminas de papel de hornear. La estiramos con la ayuda de un rodillo hasta alcanzar el grosor deseado, unos 0,5 cm aproximadamente. La reservamos en la nevera un mínimo de 45 minutos. Es importante dejar reposar la masa en la nevera, para que esté bien fría en el momento de formar nuestras galletas.
Tras el reposo sacamos la masa de galleta de la nevera, quitamos el papel de hornear de la parte superior y, con la ayuda de un cortador con forma de corazón, comenzamos a formar nuestras galletas. Cortamos tantos corazones como podamos y los vamos colocando en una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Con la masa sobrante formamos una bola, la estiramos nuevamente y continuamos cortando corazones. Es importante que la masa esté bien fría en el momento de hornear las galletas, para que estas no se deformen con el calor del horno. Por lo que, si al cortarlas notamos que la masa está demasiado blanda, las reservamos unos minutos en la nevera.
En este punto que hemos formado todas las galletas de corazón, unas 35 en total, las horneamos en dos tandas. El horno lo tendremos precalentado a 180 ºC con calor arriba y abajo, durante unos 10-12 minutos, o hasta que los bordes de las galletas comiencen a dorarse.
Pasados 12 minutos nuestras galletas ya están bien cocinadas. Las sacamos del horno y las colocamos encima de una rejilla para que se enfríen por completo. Mientras tanto horneamos la segunda tanda de galletas del mismo modo.
Ahora que las galletas se han enfriado y endurecido, preparamos la cobertura. Para ello en un cuenco ponemos el chocolate troceado junto con la mantequilla y lo llevamos al microondas para que se derrita, en intervalos cortos de pocos segundos, para que el chocolate no se queme. En mi caso estoy utilizando un chocolate con un 70 % de cacao, pero se puede poner cualquier otro tipo de chocolate.
Hecho esto, cubrimos de chocolate la mitad de cada corazón de galleta. Las bañamos bien en chocolate, escurrimos el exceso y las colocamos en una bandeja forrada con papel de horno.
Dejamos reposar nuestras galletas durante unas horas, hasta que el chocolate se enfríe y solidifique.
Tras el reposo ya podemos disfrutar de todo el sabor de nuestras galletas.
A continuación os dejo el vídeo con el paso a paso de esta receta.