Hoy os traigo una receta de tarta de queso sin horno, muy cremosa y en versión mini. Además como en unos días se celebra San Valentín, vamos a decorar las mini-tartas de queso con unos divertidos corazones de fresa.

( Más abajo tienes el vídeo de esta receta )

Ingredientes de la receta

  • Queso crema (250 g)
  • Yogur griego (125 g)
  • Leche (100 ml)
  • Azúcar (80 g)
  • Cuajada en polvo (1 sobre)
  • Galletas Digestive (100 g)
  • Mantequilla (60 g)

Para la salsa de fresa:

  • Fresas (130 g)
  • Azúcar (2 cucharadas)
  • Zumo de limón

Elaboración de la receta

Comenzamos preparando una salsa de fresa. Para ello en un cazo al fuego ponemos 130 gramos de fresas, que pueden ser congeladas o frescas. Añadimos 2 cucharadas de azúcar y un buen chorro de zumo de limón. Cocinamos las fresas durante 5 minutos a fuego medio, removiendo de vez en cuando para ayudar a que se deshagan. Una vez que tengamos una salsa reducida, la apartamos del fuego y pasamos la salsa por un colador. De este modo tendremos una salsa de fresa más fina. Reservamos la salsa de fresa dentro de una bolsa para congelar alimentos o bien en una manga pastelera.

Colando la salsa de fresa
Colando la salsa de fresa

Continuamos preparando la base de galleta. Ponemos 6-7 galletas (100 g) tipo Digestive dentro de una bolsa con cierre zip y las machacamos. Ponemos la galleta machacada dentro de un bol y la mezclamos con 60 gramos de mantequilla derretida. Seguidamente colocamos unas cápsulas de papel dentro de un molde para magdalenas y distribuimos cucharaditas de galleta dentro de cada cápsula. Aplastamos para formar una base compacta. Reservamos el molde en el congelador mientras continuamos con la receta.

Preparando la base de galleta
Preparando la base de galleta

Continuamos preparando la crema de queso. En una olla ponemos 250 gramos de queso crema y mezclamos para suavizarlo. Añadimos un yogur griego natural sin azúcar (125 g), 100 mililitros de leche, 80 gramos de azúcar y un sobre de cuajada en polvo. Mezclamos bien para que la cuajada se disuelva. Es importante que los ingredientes estén fríos para que no se formen grumos de cuajada. Ponemos la olla al fuego y cocinamos a fuego medio-bajo sin parar de remover. Removemos con unas varillas para ayudar a deshacer los grumos del queso y conseguir una crema fina.

Preparando la crema de queso
Preparando la crema de queso

Pasados unos 5 minutos la crema de queso ha espesado y comienza a hervir. En este punto ya la tenemos terminada. Apartamos la olla del fuego y distribuimos la crema de queso dentro de las cápsulas, sobre la base de galleta. En total nos saldrán 1o mini-tartas.

Repartiendo la crema de queso dentro de las cápsulas
Repartiendo la crema de queso dentro de las cápsulas

Hecho esto comenzamos a decorar las tartas con la salsa de fresa. Para ello cortamos una esquina de la bolsa o manga pastelera, de tal modo que quede un agujero pequeño. Colocamos 5 gotas de salsa de fresa en la superficie de cada tarta, comenzando en el centro y continuando por el perímetro exterior, como se ve en la siguiente foto.

Repartiendo la salsa de fresa en la superficie de cada tarta
Repartiendo la salsa de fresa en la superficie de cada tarta

Seguidamente con la ayuda de un palillo arrastramos las gotas de salsa formando figuras, como se ve en la siguiente foto, y dibujando de este modo una espiral de corazones. Esta decoración es totalmente opcional. Se puede poner la salsa a modo de cobertura en el momento de servir las mini-tartas.

Dibujando la espiral de corazones
Dibujando la espiral de corazones

Reservamos las tartas dentro del molde en la nevera un mínimo de 4 horas, o bien de un día para otro.

Tras las horas de reposo ya solo queda sacar las tartas de queso del molde y servir.

Mini-tartas de queso y fresas
Mini-tartas de queso y fresas

A continuación os dejo el vídeo con el paso a paso de esta receta.

Vídeo-receta