
¿Hay algo mejor que el olor a bollería recién horneada? Estos rollos de canela caseros son tiernos, esponjosos y muy fáciles de preparar. No necesitas amasadora ni experiencia previa, solo un poco de paciencia para dejar que la masa repose durante una hora. El resultado: unos bollos caseros irresistibles, con el equilibrio justo de dulzor, aroma a canela y una cobertura suave que los hace aún más deliciosos.
Ingredientes
Para la masa:
- 250 g de harina de trigo común
- 12,5 g de levadura fresca de panadero (o 3,5 g de levadura seca)
- 15 g de azúcar moreno (o blanco)
- 120 ml de leche templada
- 30 g de mantequilla derretida
- 1 huevo mediano
- Una pizca de sal
Para el relleno de canela:
- 40 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
- 50 g de azúcar moreno
- 1 cucharada de canela (unos 7 g)
Para el glaseado:
- 2 cucharadas de azúcar glas
- Un chorrito de leche
Elaboración paso a paso
1. Preparar la masa
Templa la leche, no debe estar muy caliente para que la levadura no se estropee. Añade el azúcar y la levadura, remueve hasta que se disuelvan e integren bien en la leche.
En un bol grande, pon la harina, el huevo, la pizca de sal y la mezcla de leche con levadura y azúcar.

Mezcla con una espátula, hasta que esté todo integrado, y añade la mantequilla derretida.
Amasa unos minutos con la mano hasta que la mantequilla quede integrada y la masa esté más uniforme (seguirá algo pegajosa, es normal).

Tapa con film y deja reposar 10 minutos. Tras este reposo la masa dejará de estar pegajosa y podremos formar los rollos.
2. Preparar el relleno
Mientras la masa reposa, mezcla la mantequilla blanda con el azúcar moreno y la canela, hasta formar una pasta.
3. Formar los rollos
Pasados los 10 minutos, espolvorea un poco de harina en la mesa y estira la masa con un rodillo, formando un rectángulo de 1 cm de grosor.
Extiende el relleno por toda la superficie y enrolla la masa con cuidado.

Corta en porciones iguales (saldrán entre 6-8 rollos) y colócalos en una bandeja de horno forrada con papel de hornear.
4. Dejar levar
Tapa los rollos con film y deja reposar en un lugar cálido hasta que dupliquen su tamaño (unos 60-90 minutos, según la temperatura ambiente).

Una vez que los rollos de canela hayan doblado su volumen, ya los puedes hornear.

5. Hornear
Con el horno precalentado a 180 °C (calor arriba y abajo), hornea durante 15-20 minutos hasta que estén dorados.

6. Preparar el glaseado
Mezcla 2 cucharadas de azúcar glas con un chorrito de leche. Añade la leche poco a poco hasta conseguir una textura densa y fluida.
7. Decorar y disfrutar
Vierte el glaseado por encima de los rollos mientras aún están calientes.
¡Y listo! Disfruta de unos rollos de canela caseros tiernos, esponjosos y con un sabor espectacular.

El resultado son unos rollos de canela aromáticos y con el punto justo de dulzor, perfectos para acompañar un café o un chocolate caliente.
A continuación puedes ver el vídeo con el paso a paso de esta receta.
Vídeo-receta
