Hoy os traigo una receta de costillas asadas y guisadas que queda deliciosa: costillas al calimocho. Sí, habéis leído bien, se trata de unas deliciosas costillas al calimocho, esa bebida tan popular a base de vino tinto y Coca Cola, Pepsi, o cualquier otra bebida de cola.
El calimocho (o kalimotxo) es una bebida alcohólica que se toma tanto en España como en países de Latinoamérica. En estos últimos es conocido de diferentes formas: vino con cola, tincola, jote o cascarudo.
Estas costillas al calimocho quedan realmente deliciosas, ya que los azúcares del vino y de la Coca Cola (o Pepsi) se reducen durante la cocción e impregnan a las costillas de todo su sabor. Y una vez que se ha reducido el calimocho en el guiso, nos va a quedar una salsa de Coca Cola y vino muy espesa y dulzona, que combina muy bien con las costillas de cerdo asadas o con cualquier otra receta de carne.
INGREDIENTES
(para 2-4 personas)
- 1 costillar de cerdo (que pese 1 kg aproximadamente)
- Sal
- Pimienta
- Aceite
- 2 cebolletas
- 1 vaso de vino tinto
- 1 lata de refresco de cola (33 cl)
ELABORACIÓN
Salpimentamos las costillas y las freímos en una sartén hasta que estén bien doradas.
En el momento en que las costillas estén bien fritas, las sacamos de la sartén y añadimos la cebolleta bien picada. Dejamos que esta cebolleta se sofría durante unos minutos y después añadimos de nuevo a la sartén nuestras costillas.
Seguidamente añadimos (a las costillas) el calimocho, que habremos preparado mezclando el vaso de vino tinto y la lata de refresco de cola, que puede ser Coca Cola, Pepsi, o vuestra marca de refresco de cola favorita.
Dejamos cocinar las costillas, cubiertas del calimocho, durante 40-45 minutos, hasta que estén bien tiernas y el calimocho se haya reducido. Nos tiene que quedar algo parecido a esta foto:
Cuando las costillas estén bien cocinadas, las sacamos a una fuente apta para el horno, las cubrimos con la salsa reducida y las horneamos a 200 ºC durante 10-15 minutos. Ésto lo hacemos para que las costillas queden más doradas y caramelizadas. Os recomiendo que no os saltéis este paso, ya que el horno le da un toque muy bueno a la costilla.
Y en este momento ya podemos llevar las costillas asadas a la mesa, acompañadas de la salsa de calimocho, que estará bien reducida y espesa.
VÍDEO