Cuando se acercan las fiestas navideñas, nuestra cocina empieza a llenarse de aromas dulces, de recetas especiales y, cómo no, de ese turrón que nunca falta en ninguna casa. Y aunque nos encanta disfrutarlo tal cual, a veces queda alguna tableta medio empezada o simplemente apetece transformar ese sabor tan tradicional en un postre diferente. Así nace este Flan de Turrón blando (Jijona), fácil y cremoso, un dulce elegante, sencillo y perfecto tanto para una comida festiva como para cualquier día en el que nos queramos dar un capricho.

Lo maravilloso de este flan es que, además de ser muy fácil de preparar, conserva toda la esencia del turrón de Jijona: su aroma a almendra, su textura delicada y ese punto dulce tan característico. Es un postre que sorprende a primera vista, porque tiene un color suave, como café con leche, pero al probarlo te envuelve con un sabor profundo, navideño y muy reconfortante.

Ingredientes

  • 4 huevos
  • 500 ml de leche entera
  • 250 g de turrón de Jijona (turrón blando)
  • 70 g de azúcar
  • 100 g de azúcar (para el caramelo)
  • 1 cucharada de agua (para el caramelo)

Elaboración

El caramelo: el comienzo de todo

Como todo buen flan, empezamos preparando un simple caramelo casero. Basta con poner el azúcar y una cucharada de agua en una sartén a fuego medio-bajo y dejar que poco a poco se transforme en un líquido dorado, brillante, con ese color ámbar irresistible. Es un proceso sencillo, pero mágico: el momento en el que las burbujas desaparecen y aparece ese aroma tostado que llena la cocina.

Vertemos el caramelo en las flaneras —o en un molde grande, si prefieres hacer un solo flan— y lo dejamos solidificar mientras preparamos la mezcla del flan. Este paso, aunque breve, es fundamental: un buen caramelo marca la diferencia en el sabor final.

La mezcla del flan: solo cuatro ingredientes

La base de este flan no puede ser más sencilla: turrón de Jijona, leche, azúcar y huevos. Nada más. Troceamos el turrón para que la batidora lo integre mejor. Lo incorporamos al vaso de la batidora (o jarra) junto con la leche, el azúcar y los huevos, y batimos a velocidad media para que todo quede bien incorporado. Queremos una mezcla lisa y homogénea, sin burbujas, que será la clave para obtener un flan suave y cremoso.

Preparando la mezcla del flan de turrón
Preparando la mezcla del flan de turrón

Es un momento en el que ya se empieza a intuir el resultado final: el color cálido de la mezcla, el aroma del turrón… todo invita a pensar que estamos preparando algo especial.

La cocción: baño María, paciencia y cariño

Vertemos la mezcla en las flaneras caramelizadas y las colocamos en una bandeja con agua caliente. El baño María es fundamental para que el flan cuaje de manera uniforme, sin grietas y manteniendo una textura delicada. Con 45 minutos en el horno a 180 ºC, calor arriba y abajo, conseguimos un flan perfecto: cuajado, pero cremoso; firme, pero delicado.

Vertiendo la mezcla del flan en las flaneras caramelizadas
Vertiendo la mezcla del flan en las flaneras caramelizadas

Al sacarlos del horno, los dejamos reposar un poco dentro del mismo baño María para que el cambio de temperatura no sea brusco y después los pasamos a una rejilla para que terminen de enfriarse. Aquí empieza la parte más difícil: esperar. Porque una vez fríos, necesitan unas horas de nevera para alcanzar su punto ideal.

Flanes de turrón recién salidos del horno
Flanes de turrón recién salidos del horno

El gran momento: desmoldar

Cuando llega la hora de desmoldar, siempre hay un pequeño suspense. Pasamos una espátula por los bordes, introducimos la flanera en un recipiente con agua caliente (unos minutos), volteamos sobre un plato y… ¡el flan cae suavemente sobre el plato, bañado en su propio caramelo! Es una escena que nunca decepciona: brillante, suave y con una pinta espectacular.

Flan de turrón
Flan de turrón

Puedes servirlo tal cual o añadir un toque especial con un rosetón de nata montada y un poco de turrón desmigado. Queda bonito, festivo y perfecto para cerrar cualquier comida especial.

¿A qué sabe?

A Navidad. A almendra tostada. A postre casero.
Es un flan muy cremoso, con un sabor a turrón presente pero equilibrado, y con el caramelo aportando el dulzor justo. No es excesivamente dulce, lo que hace que cada cucharada sea deliciosa y nada empalagosa.

Es un postre que sorprende por su sencillez y al mismo tiempo enamora por su sabor. Ideal para compartir, para reutilizar turrón o simplemente para disfrutar de un flan diferente.

A continuación puedes ver el vídeo con el paso a paso de esta receta.

Vídeo

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