Hace tiempo que tenía ganas de preparar esta receta de tarta de limón. Se trata de una tarta muy fácil y rápida de preparar, elaborada con una rica crema de limón sobre una base de galleta.
Os aseguro que esta tarta de limón se come sola. De dulzor queda perfecta, no se hace nada empalagosa. El sabor a limón está muy presente en cada bocado, lo cual hace que sea una tarta muy fresca y sabrosa. Pero lo que más me ha gustado de esta tarta es la textura de la crema de limón, suave, cremosa e irresistible.
Ingredientes de la receta
Crema de limón:
- Limones (2 pequeños, 140 ml de zumo + ralladura)
- Yemas (4 de huevos medianos)
- Leche condensada (400 g)
Base y decoración:
- Galletas Digestive (200 g)
- Mantequilla (70 g)
- Azúcar moreno (2 cucharadas)
- Nata para montar (115 ml)
- Azúcar glas (1 cucharada)
- Ralladura de un limón
(*) Si lo necesitas, puedes consultar las tablas de medidas y equivalencias en cocina y repostería.
Elaboración de la receta
Comenzamos preparando la base o recipiente de galleta. Para ello machacamos 200 gramos de galletas Digestive, hasta conseguir una especie de «arena de galleta». Ahora ponemos esta «arena de galleta» en un bol junto con 2 cucharadas soperas de azúcar moreno y 70 gramos de mantequilla derretida. Mezclamos bien hasta que la galleta se humedezca. Seguidamente ponemos esta mezcla de galleta dentro de un molde apto para el horno. En mi caso utilizo un molde redondo de unos 20 centímetros de diámetro y de 1 litro de capacidad. Es un molde de aluminio reutilizable que venden en los supermercados, perfecto para elaborar esta tarta. Distribuimos la mezcla de galleta tanto por las paredes del molde como por la base, aplastando con el dorso de una cuchara para formar un recipiente de galleta compacto.
Hecho esto reservamos el molde en el congelador mientras continuamos con la receta.
A continuación limpiamos bien dos limones pequeños y rallamos su piel dentro de un bol grande. Seguidamente y aparte, exprimimos el zumo de estos dos limones, lo colamos y lo reservamos. En total necesitamos 140 mililitros de zumo de limón aproximadamente.
Ahora separamos las yemas de las claras de 4 huevos medianos. En esta receta solo vamos a utilizar las yemas. Una vez separadas, ponemos las yemas dentro del bol en el que hemos rallado la piel de los limones. Batimos hasta que las yemas cambien de color ligeramente, quedando algo más blanquecinas.
En este punto añadimos e integramos dentro del bol 400 gramos de leche condensada. Por último incorporamos los 140 mililitros de zumo de limón. Mezclamos todos los ingredientes y en pocos segundos se formará una crema de limón espesa.
Añadimos la crema de limón dentro del molde, sobre el recipiente de galleta. Y llevamos la tarta al horno, que lo tendremos precalentado a 180 ºC, con calor arriba y abajo, durante 20-25 minutos.
Pasados 20 minutos nuestra tarta de limón ya estará bien cocinada. La crema tiene que temblar ligeramente, igual que un flan. Con este tiempo es suficiente para que las yemas se cocinen. Sacamos la tarta del horno y dejamos que se enfríe por completo a temperatura ambiente. Una vez fría la reservaremos en la nevera de un día para otro.
Tras las horas de reposo nuestra tarta ya estará en su punto para comer, fría y cremosa. La sacamos del molde, cortando los extremos de este, la colocamos en un plato y la decoramos al gusto. En mi caso la he decorado con unos copetes de nata recién montada y la ralladura de un limón. Para montar la nata he utilizado 115 mililitros de nata para montar (o crema para batir) con un 35% de materia grasa. La nata debe estar bien fría y la montaremos junto con una cucharada de azúcar glas.
A continuación podéis ver el vídeo con el paso a paso de esta receta.